Behobia-San Sebastián 2014 – edición quincuagésima (50)
Este año la motivación que tenía la clásica Behobia-San Sebastián
radicaba en el ordinal. No permite el
tiempo disfrutar de números tan
elocuentes con frecuencia. Por ello, resultaba difícil decir no a esta tentación. La verdad
es que mi nula participación en carreras
hace que me sienta a mediados de semana todavía frío. Es esa sensación de pensar “cómo responderá
el cuerpo en la carrera”, y es que desde e l maratón de San Fermín (¡allá está junio!) me he dedicado a la
tranquilidad. Demasiada tranquilidad en el verano, en lo que a entrenamientos
se refiere. Y luego, lo de siempre: a empezar de nuevo. Septiembre para coger
el ritmo y octubre para ponerse a punto. Y a esperar. Hoy tenía la intención de
salir a “trotar” un poco pero la noche
lluviosa ha sido un argumento convincente que se ha unido a mis poquitas ganas que
tenía. Además me planteo que qué más da salir un día más o un día menos. No me
preocupa mucho el tiempo que haga aunque seguro que en la carrera lo voy a dar
todo.
Para esta nueva edición ha cambiado algo el recorrido.
Dicen que hay algo menos subida y casi doscientos metros más. Las previsiones meteorológicas dan
lluvia, o sea que nos espera “menuda” mañanita. Solo espero que Eolo prohíba
salir a pasear a sus monaguillos y así tener un elemento menos contra el que
luchar.